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Mayor grado de utilización de volumen, velocidad superior de preparación de pedidos, fiabilidad y disponibilidad del sistema en combinación con un procesamiento de datos en tiempo real: Ehrhardt Partner Group (EPG) ha ampliado su sistema de gestión de almacenes LFS con una solución neutra en cuanto al sector para el almacén automático de piezas pequeñas. La nueva solución AutoStore se comunica con los datos del almacén de piezas pequeñas y los facilita a LFS en tiempo real. De este modo, se asegura un intercambio óptimo de información entre el mando de control del almacén, AutoStore y los clientes o los proveedores. Los costes de proceso se reducen así de forma eficaz. El módulo se está utilizando en YKK DEUTSCHLAND GmbH desde principios de año. El mayor fabricante mundial de cremalleras apuesta desde 2014 por el sistema de gestión de almacenes de EPG, y ahora emplea la ampliación de LFS para la nueva AutoStore en el emplazamiento de la localidad de Wenkbach, en Hessen.
Sea para chaquetas, bolsas o pantalones: las cremalleras del líder del mercado YKK, fundado en 1934, se aplican en gran cantidad de prendas de las grandes marcas de moda o como tamaños especiales en tiendas de campaña. La empresa japonesa confía en el sistema de gestión de almacenes LFS de EPG para la logística de almacén en Alemania y los Países Bajos. En Alemania, YKK opera tres grandes centros logísticos. Allí, la empresa produce, almacena y comercializa cremalleras, así como otras técnicas de unión. Alrededor de 13 000 clientes, entre ellos pequeñas tiendas de trabajo manual y grandes marcas de moda, reciben a diario suministros desde Alemania en toda Europa. En Wenkbach, con el sistema de gestión de almacenes de EPG se administran tanto la producción y el almacenamiento como el suministro de recambios para las propias máquinas. LFS garantiza una máxima precisión de inventario dentro de la diversa gama de artículos y variantes del fabricante de cremalleras.
YKK prefiere una solución completa de EPG
YKK se decidió al año pasado por la introducción de un almacén automático
de piezas pequeñas, para responder a las crecientes exigencias del mercado. La solución AutoStore sustituyó el clásico sistema de estantes de almacén por contenedores de diseño modular. Dichos contenedores están superpuestos dentro de una construcción de aluminio y se desplazan mediante robots. «Con nuestro antiguo sistema manual hemos llegado al límite, ya que el comportamiento de pedidos de nuestros clientes ha cambiado. Cada vez nos llegan más pedidos tardíos solicitando un envío rápido», dice Alexander Sann, Gerente de planta adjunto en YKK. AutoStore también posibilita ahora un «servicio de entregas el mismo día». Para que los procesos sigan desarrollándose con fluidez en el almacén, el fabricante de cremalleras precisaba una conexión con LFS. «Una interfaz más entre el sistema ERP, LFS y un proveedor tercero no entraba en consideración. Dada excelente experiencia que tuvimos hasta el momento con el sistema de gestión de almacenes LFS, también hemos preferido claramente la solución de EPG», explica Sann.
El módulo AutoStore se comunica en tiempo real con LFS
Con el nuevo módulo AutoStore, los especialistas en software de cadena de suministro de EPG desarrollaron la solución justa para YKK. Hasta ahora solo era posible operar los puestos de trabajo de los preparadores de pedidos en el almacén automático de piezas pequeñas con el software AutoStore. Si YKK quisiera transferir datos de existencias, p. ej. de artículos disponibles, de AutoStore a LFS, EPG tendría que haber programado la interfaz para poder garantizar un intercambio de datos sin ningún inconveniente. «Para evitar en el futuro la programación de las interfaces y el complicado proceso de ajuste, en LFS hemos integrado el nuevo módulo AutoStore. Así, los puestos de trabajo en AutoStore se pueden operar con LFS, de modo que YKK no necesita trabajar con dos sistemas distintos», explica Moritz Schmitt, Jefe de proyectos de clientes en EPG. Con ayuda del nuevo módulo, YKK puede controlar tanto la entrada como la salida de mercancías, además de organizar el inventario y tramitar pedidos con mayor rapidez. «LFS conoce las existencias y procesa los pedidos de los clientes. Para eso, se comunica directamente con AutoStore y activa el contenedor correspondiente con la mercancía requerida», dice Schmitt. Las actualizaciones de los pedidos, como cambios en la prioridad de procesamiento, y también correcciones en las existencias son ejecutables con LFS hasta el último paso posible. Así pues, en todo momento se asegura que la mercancía correcta se facilite en la cantidad precisa y el momento exacto para la preparación. De esta manera, YKK reduce considerablemente los costes de proceso.
El módulo AutoStore permite la influencia en determinados grupos de tareas
Dado que los dos sistemas se intercomunican, YKK no sufre ninguna pérdida de tiempo. Por el contrario, AutoStore permite al especialista en cierres aprovechar de forma óptima las capacidades de almacenamiento y aumentar la productividad del personal. «Los trayectos largos ya no son necesarios. La mercancía se envía automáticamente a los empleados. Y no solo eso: los puestos de trabajo en AutoStore son mucho más ergonómicos y requieren mucha menos energía que, p. ej., un carro elevador», relata Sann. En el nuevo AutoStore, los contenedores están subdivididos una vez más, en parte hasta en 16 compartimentos, debido al tamaño pequeño de los artículos. Los productos con menor demanda que otros se encuentran en la parte inferior del almacén automático de piezas pequeñas. «Con ayuda de la solución AutoStore de LFS, YKK también puede influir en la composición de los grupos de tareas que procesa AutoStore. Ello permite a YKK controlar muy bien los pedidos», dice Schmitt.
Superficie táctil intuitiva que facilita la preparación de pedidos
Para el personal, la puesta en uso de AutoStore no implicó ningún gran cambio. Sann destaca la facilidad de uso de una superficie táctil intuitiva. AutoStore dispone de cuatro multiestaciones con puertos de carrusel, una técnica especial de transporte que tiene preparado de inmediato el siguiente contenedor y una velocidad de envío nuevamente incrementada. Cuando la mercancía abandona el AutoStore para su preparación, LFS imprime una etiqueta en bolsa de polietileno con la indicación exacta de la longitud de las cremalleras. Así es posible ahora minimizar los errores. Alexander Sann destaca fundamentalmente la reducida tasa de error tras poner en uso la solución AutoStore en LFS: «Lo más importante para nosotros era poder seguir ofreciendo a nuestros clientes la calidad habitual durante la fase de implementación. Y eso se garantizó en todo momento».